Cuando se anunciaba que Mario Ledesma asumía como entrenadores de los Jaguares, pensé que nos habíamos equivocado una vez más, que era necesario que viniera alguien extranjero, nacido y criado en otro contexto más profesional, de mayor exigencia, con otra forma de trabajo.
Sin darme cuenta, estaba yendo contra una convicción que ya tenía, pero de un contexto distinto del de los deportes: los equipos de trabajo de clase mundial no se construyen únicamente en las regiones más avanzadas del mundo. Se pueden construir acá mismo.
Para construirlos se necesitan convicción y esfuerzo, al principio sin que importen pronósticos y resultados. El largo camino sin atajos de ir desafiándonos cada día un poco más. La competencia con uno mismo.
…mejorar en todos los entrenamientos y en todos los partidos.
La tarea de Mario y Nicolás Fernández Miranda arranca el 22 de enero.
No me acuerdo en qué momento de la temporada leí por primera vez alguna declaración de Mario tras un partido, pero cuando las palabras que aparecieron fueron “proceso”, “norte”, “paciencia”, e ideas similares a “ni saltando de alegría cuando ganamos ni llorando por los rincones cuando perdemos” me hicieron dar cuenta que venían a entrenar con otra cabeza.
Una cabeza muy alineada a la de Bill Walsh y su gran frase:
Los campeones se comportan como campeones antes de ser campeones.
La primera victoria
Jaguares arrancaban la temporada con 3 derrotas que se sumaban a las 7 derrotas de los últimos partidos de la temporada 2017.
El 11 de marzo consiguen cortar con esa racha imponiéndose a Waratahs:
En la conferencia de prensa los periodistas querían saber qué había cambiado para lograr el resultado. Mario contesta que había sido una semana como cualquiera de las anteriores. Básicamente ellos preguntaban por la fórmula mágica, la que Mario sabe que no existe.
En sus respuestas de todas maneras aparecían dos puntos que podían explicar el resultado:
1) El hambre del equipo:
La gente dice ‘Uy, tienen todos los rebotes’ o ‘Agarran todas las pelotas’…
No, generalmente es la energía que vos le metés para recuperar esa pelota, y esa pelota viene.
2) El fruto del laburo sostenido, que lamentablemente es difícil empezar a ver al comienzo, hasta que un día empieza a verse… y quizás se esconde un tiempo más en el futuro para finalmente ser parte ya del repertorio habitual:
Salieron muchas de las cosas que venimos practicando.
La confianza, más allá de los resultados
En el siguiente partido Jaguares perdía de nuevo con los Reds, y unos días más tarde JP Varsky le preguntaba: ¿cuánto influyen los resultados, hasta ahora más adversos que positivos, a la hora de ejecutar tu plan?
Nada. Si vos definís los pilares de tu equipo, tu marca registrada y trazás un norte, sería muy argentino cambiar porque no se van dando las cosas. Yo soy el primer apurado porque las cosas salgan, pero hay cosas que se pueden esperar y otras no.
Más allá de que uno pueda sentirse identificado con este sistema — mi caso –, hay que saber que es una postura, una decisión subjetiva: liderar desde el proceso sin mirar los resultados exige mucha disciplina y espacio (tiempo) organizacional para hacerlo. No todas las organizaciones se bancan períodos largos de inversión en el equipo sin que se vean resultados.
Cuando se despedía de su rol de coach asistente de Australia, Mario decía que de su experiencia entrenando en Francia, con una visión más enfocada en los resultados, se llevaba algunas cosas buenas y otras no tanto; pero que en su experiencia de entrenamiento en Australia, enfocada en “mejorar como personas, mejorar como jugadores, el proceso”, todo había sido bueno.
La clave de la diferencia entre uno y otro radica en que uno pone al resultado por encima de todo mientras que el otro pone al proceso por encima de todo.
Quienes ejecutan y aprenden bajo esta mirada del proceso, entienden que es la mejor manera de aumentar las probabilidades de conseguir resultados sostenibles en el mediano y largo plazo. Estás construyendo capacidad.
El siguiente partido lo ganarían contra Lions, y el siguiente lo perderían contra Crusaders, justo antes de emprender la gira de 4 semanas por Oceanía.
La disciplina
En aquella misma entrevista, Mario contaba la agenda semanal de Jaguares:
- Domingo: recuperación todos juntos.
- Lunes: estudio, análisis desde nuestros pilares de juego. Entrenamiento muy liviano de cosas nuevas. Revisión de videos con acciones individuales. Cada jugador tiene los extractos de sus intervenciones en el partido anterior. Se filman los entrenamientos también.
- Martes: entrenamiento fuerte físico y de contacto. Quizás terminan más cansados un martes que un sábado después del partido. A la mañana hay una hora de consulta, de dudas y trabajo en grupo.
- Miércoles: libre.
- Jueves: similar al martes pero más liviano, sin tanto contacto.
- Viernes: captain’s run. El equipo repasa qué quiere hacer al día siguiente. Se hace en Vélez cuando juegan de locales.
- Sábado: se juntan temprano en Vélez. “Relajarnos, estar juntos”.
Esfuerzo, energía y el sacrificio que los chicos tienen que hacer en todos los entrenamientos de la semana, y somos muy exigentes con eso, y los chicos están aprendiendo a ser exigentes ellos también.
La exigencia para con el staff técnico es idéntica:
No podemos darnos el lujo de no preparar una reunión, no preparar un entrenamiento, de llegar a un entrenamiento y estar dudando.
Como en prácticamente todos los ámbitos competitivos, la parte mental ocupa un lugar clave:
Mucha bola a la cabeza, tanto o más que al entrenamiento que hacemos en la cancha.
Su filosofía de liderazgo se deja ver como una muy centrada en el proceso individual y colectivo de desafiarse cada día un poco más, resumida en una sola palabra: “Laburo”. Una de sus palabras permanentes.
El camino implica mirar la derrota y la victoria con ojos críticos: saber encontrar los puntos de mejora, y saber reconocer campo ganado. Ser paciente en la derrota y moderado en la victoria.
Generalmente se necesita un ojo clínico y un estómago a prueba de todo para revisar las “ruinas” de tus resultados y encontrar puntos de esperanza. La cantidad de derrotas y victorias pueden o no decirte lo que necesitás saber para entender las fortalezas de tu equipo. Por eso, buscaba pistas que pudieran indicar si estábamos moviéndonos en la dirección correcta, a la velocidad correcta, y si no, qué necesitábamos hacer para lograrlo.
Exactamente lo mismo que veía Mario al principio de la temporada:
En todos los partidos yo veía que empezaban a aparecer cosas. Siempre había algo que me hacía esperar algo mejor.
La racha y confianza
Los siguientes 4 partidos fueron victorias en Australia y en Oceanía, sellando marcas históricas para el rugby argentino.
El fruto de ese laburo sostenido empezaba a palparse. La disciplina empezaba a dar resultado y el equipo que antes se veía ausente aprovechaba cada partido para marcar su presencia… y ser conscientes de eso mismo.
Hoy el equipo es de ellos.
Los Jaguares vuelven a Argentina y después de la segunda victoria en casa, Mario empieza a dar señales de cómo va avanzando la conversación, cómo equipo y staff van ganando profundidad:
El hecho de laburar tanto y conocer tanto el juego y el laburo de cada uno hace que empieces a creer también y te empieces a adueñar de lo que hacés.
La ventana de junio de partidos de Los Pumas interrumpiría unas semanas el Super Rugby. Los Pumas tendrían malos resultados y Hourcade renunciaría a su cargo.
Jaguares se junta de nuevo para retomar la temporada. El martes antes del partido con Stormers, el seleccionado argentino de fútbol se jugaba la clasificación a los octavos de final contra Nigeria. Ese era el día de entrenamiento más pesado.
Ni plantel ni entrenadores vieron el partido.
Agustín Creevy lo expresaba de esta manera:
Nuestra obligación es entrenarnos a la hora que corresponde. Nada hay más importante para nosotros que el partido del sábado.
…partido que terminaron ganando.
Mario, el 30 de junio:
Ni muy contentos ni muy exaltados… Tampoco en las derrotas… Esto no es algo de un fin de semana.
Pasaje a playoffs y a Los Pumas
Con la corriente exitista de siempre, la gente empezaba a preguntar por los playoffs y la postura era clara: “Yo no puedo un fin de semana decirles que esto es algo a largo plazo y ahora que se están dando algunos resultados decirles que vamos por todo”.
Jaguares terminó finalmente clasificando a pesar de las dos derrotas en las últimas dos fechas, pero en cuartos de final se topó con Lions que lo dejó afuera.
La temporada terminaría el 22 de julio y el 31 Ledesma y Fernández Miranda serían confirmados entrenadores de Los Pumas.
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Los Jaguares ya quedaron marcados por la experiencia: la mejora es un proceso y el límite lo pone uno.
Es posible mejorar. Fijarse metas y cumplirlas. Es posible crecer en profundidad en el juego propio y en el juego colectivo. Es posible superarse, y, en el camino, superar rivales. Y todo esto, disfrutando del proceso.
La convicción y la confianza de que Jaguares tiene la capacidad de llegar hasta donde se lo proponga.
…decía Nicolás.
Gran ejemplo de liderazgo en nuestro tiempo de Mario, Nicolás, el staff técnico y los jugadores.